Me digo que no es para tanto.
Luego me miro en el espejo,
y mi reflejo
se ríe de mi y me dice
- Eso no te lo crees ni tú
Y es verdad.
Lo que mas me asusta es esta calma;
el vacío por dentro
al que no consigo dar forma,
el silencio.
Me angustia
saber que algo dentro de mi esta en ruinas
y no poder llorarlo.
Ya no sé si es por él
que se ha ido
o por mi
que me he quedado.
Pero vacía
Y me asusta.
La calma
me asusta.
Porque no es la calma de estar bien
de la tranquilidad
no.
Es la calma de antes de la tormenta.
Pero lleva meses lloviendo dentro de casa y no sé qué más debo esperar.
Y el vacío, eso es lo peor.
El vacío de no saber que hay ahí
ni aquí
sin sueños
sin motivos.
Me asusta la espera,
el tiempo que ha de pasar hasta que no duela
(y la ausencia de certeza
de que dejara de hacerlo)
Me da miedo quedarme estancada
aquí para siempre,
sin ti.
Sin mi.